Asambleístas denuncian la construcción desmedida de edificios y el hacinamiento en el centro de Quilmes

Días atrás advirtieron el colapso en desagües cloacales

Los integrantes de Quilmes Unido pusieron al descubierto una vez más cuál es la operatoria de los empresarios de la construcción. Denuncian que sólo les interesa hacer negocios, sin importarle el medio ambiente, ni el impacto urbanístico

Foto: "Prometen excelente vistas, y por supuesto agravando cada vez más el colapsado sistema de cloacas, servicios y llevando más caos al barrio", afirman.

'La Voracidad de los constructores no tendría límites'. Con estas palabras y por intermedio de imágenes tomadas en diferentes sectores del centro quilmeño, los asambleístas nucleados en Quilmes Unido volvieron a manifestarse contra las megasedificaciones. Denuncian que a los constructores no les interesa el ambiente, ni el impacto urbanístico. 'Les interesa hacer negocios' y sólo erigen torres: 'una al lado de otra'.
El reclamo se repite. Las edificaciones avanzan piso a piso en diferentes calles céntricas. Los vecinos denuncian a diario el colapso en la ciudad. Y aseguran que a los empresarios de la construcción 'poco les interesa el impacto urbanístico y ambiental de las moles de cemento que construyen, cada vez, con más salvajismo urbano. Construyen una torre al lado de la otra sin interesarle en lo más mínimo la calidad de vida de los residentes y los vecinos que se hacinaran en esos edificios'.
Como muestra de ello, las imágenes y sus epígrafes reflejan con la libertad que se manejarían los empresarios: 'Un edificio justo enfrente de otro construidos con un año de diferencia. No se termina de construir un edificio que comienza otro al lado y utilizando las medianeras del edificio ya construido. Edificios sin solución de continuidad, un real hacinamiento de personas'.
Es por esto, que los integrantes de la Asamblea vecinalista denuncian que 'queda más que claro que lo único que les interesa es que el negocio les cierre rápido y con buena ganancia. Los problemas que estos edificios producen a la comunidad, quedarían de por vida para los vecinos residentes de cada barrio y para los incautos compradores que en muy poco tiempo están arrepentidos'.
Semanas atrás, y por intermedio de una tira (poco) cómica, los asambleístas le exigieron a las autoridades gubernamentales que declaren la emergencia ambiental y sanitaria en el casco céntrico quilmeño por el colapso de los servicios y el desborde de los desagües cloacales que tantos problemas ocasionan a la comunidad.

Agencia Suburbana.