Llega el debate del Plan Urbano, será una experiencia sin precedentes para Quilmes

La convocatoria al debate público del Plan, llega como consecuencia del reclamo impostergable de participación por parte de la ciudadanía. Se trata de un primer paso; la expectativa es alta. Lo que técnicamente se reconoce con el nombre de «audiencia pública», es una experiencia de participación ciudadana nueva para la ciudad.
Por lo amplio, lo vasto y lo complejo del tema elegido para este debut; resulta imperioso recurrir a los manuales y establecer normas claras, conocidas y aceptadas por el conjunto, que garanticen el buen funcionamiento de una herramienta de participación ciudadana que ya ha mostrado buenos resultados en otros distritos. En la entrega de mañana, con una la segunda parte de este informe, analizaremos por qué se habla de una audiencia pública, cómo se puede evitar que la oposición política intente frustrar o imponerle criterios alternativos a los impulsados por el gobierno democráticamente elegido; cómo establecer los límites. Hoy nos enfocaremos a contexto en que se propone la medida.

CUESTION DE VOLUMEN

Una cosa es una asamblea barrial; otra cosa es una reunión de consorcio. Una cosa es una asamblea de accionistas; otra cosa es un debate oficial en un club. Una cosa es una crisis en una fábrica producto de un reclamo salarial, otra cosa es un debate en el Deliberante.La historia prueba que cada escenario ha ido reclamando diversas reglamentaciones para lograr encauzar las energías y pasiones que despiertan la defensa de distintas formas de mirar en una sociedad democrática, a más intereses en juego, más claras las reglas aceptadas por todos, sin se pretende sostener la vitalidad del tejido social. Afrontar el desafío de llevar a feliz término un debate público, compartido, sobre una cuestión tan amplia para un Distrito tan populoso como el nuestro, es una cuestión que reclama máximo apego profesional y mucha explicación pública. Claro que también queda abierta la puerta para la improvisación, el personalismo, el papelón, el griterío y porque no, la descalificación y la intolerancia.

CUESTION DE HISTORIA

El Plan Urbano Ambiental sigue dando material para el debate. Lo que comenzó siendo un reclamo nacido en las entrañas tanto de Bernal Unido, como de Quilmes Unido, al poco de andar, pasó a ser «mala palabra» y materia de enorme enojo en los oídos de la anterior administración de la ciudad. Con la llegada de la campaña electoral, el mismo objetivo, pasó a ser una promesa de campaña. Mediante la firma de un acta pública, Francisco Gutiérrez transformó aquellas intenciones, palabras y frases que inspiraron distintos autazos y movilizaciones en una expectativa cierta de concreción. Finalmente los quilmeños tendremos un Plan para el crecimiento de la ciudad.Pasadas las elecciones; aquel objetivo ya un tanto trajinado, tuvo una nueva trasformación. Ahora pasó a ser el nombre de una de las secretarías del gabinete. Su responsable Braian Reninson, tiene además las Obras públicas, buena parte de los Servicios que dependen de la Comuna, así como el área de tierras, viviendas, entre otras cuestiones.

CUESTION DE HISTORIA II

Ya entrados en el mes de Julio, es decir a ocho meses de iniciada la gestión, vuelve a colocarse en los primeros planos el ahora disputado Plan Urbano Ambiental. Disputado porque como consecuencia del paso de las semanas (20 semanas, según el secretario Reninson), las organizaciones de vecinos que originalmente impulsaron la iniciativa, resolvieron autoconvocarse para comenzar a caminar el proceso que finalmente desemboque en aquel objetivo.Lo cierto es que el lunes pasado, mientras el secretario daba cuenta de las tareas de su Secretaría, a la misma hora, las organizaciones vecinales seguían adelante con su proyecto. Ambos encuentros se desarrollaban en simultáneo en el mismo edificio público.

SALDO EN ROJO 4 A 2

Para el lunes próximo el gobierno quilmeño está convocando a todos los interesados en participar en el debate del Plan Urbano Ambiental para la ciudad. Se trata de una iniciativa que no tiene antecedentes cercanos en la vida pública de la ciudad. Aunque claro está, responde a un reclamo impostergable de la ciudadanía.Gutiérrez es el séptimo intendente quilmeño, desde el regreso de la democracia. El camino lo inició Eduardo Vides, tras el triunfo de Raúl Alfonsín. Luego vino, Eduardo Camaño; tras él, Aníbal Fernández. Luego llegó el turno de Federico Scarabino; con la llegada del fenómeno de la Alianza, llega al gobierno local su versión local encabezada por Fernando Geronés. Luego Sergio Villordo y ahora Francisco Gutiérrez. De las seis experiencias ya cumplidas, cuatro terminaron muy comprometidas con denuncias judiciales. Camaño, con el Caso Servicios Sanitarios; Aníbal y sus jornadas prófugo de la Justicia; Geronés envuelto en un descalabro, con su detención incluida; y últimamente la pesadilla anibalo-villordiana. Sólo Vides y Scarabino, lograron terminar sus respectivos mandatos sin sobresaltos jurídicos.

EL NUEVO PAPEL DE LA SOCIEDAD CIVIL

Con tamaño antecedente, resulta totalmente razonable que la sociedad quilmeña haya desarrollado una expectativa de participación y construcción de una nueva forma de administrar y trasparentar las acciones de gobierno, como para aportarle al Distrito mejores condiciones de desarrollo y sustentabilidad. Un gobierno, pasa. Cuatro años parecen una eternidad en una sociedad apurada como la que compartimos, pero lo cierto es que son los ciudadanos los que tienen sus intereses, sus familias, sus raíces y aspiraciones en su terruño.La experiencia prueba que, salvo aquellos que debieron volver a sus casas presas del bochorno, cada uno de quienes fueron intendentes de Quilmes, terminaron usando su paso por la ciudad escalón dentro de su carrera política. Ninguno de ellos mostró un compromiso sostenido con la agenda real de la ciudad y mucho menos cuando soplaron vientos confrontadores. Tampoco se mostraron dispuestos a explicar el generoso desarrollo de su patrimonio personal. Salvo el caso de Eduardo Vides, en cuestiones de dinero, todo indica que al resto no le ha ido para nada mal en su carrera política.

EL NUEVO PAPEL DE LA SOCIEDAD CIVIL II

Los datos de nuestra historia, aportan elementos locales que justifican hasta el colmo, la demanda en contra del encierro del intendente de turno detrás de su entorno, la apertura de formas democráticas de acceso a la información pública y el hacer efectivo la participación.Más allá de las dolorosas distancias sociales que todavía persisten, estas aspiraciones se repiten en cada rincón de la ciudad. Cada sector a su modo, busca una democracia mucho más directa que lo que tuvimos hasta aquí. Claro que a esta mirada hacia lo local, cada uno de los lectores le podrá añadir de su cosecha personal, otros condimentos que surgen de la sociedad globalizada. Mucho más intermediada por la prensa y con muchas herramientas de participación directa al alcance de la mano, como puede ser: la inmediatez de la radio, lo fulminante de la imagen o de una palabra, en televisión, internet, el correo electrónico o el mensajito de texto del celular. Si hasta el conflicto con el campo, con sus distintas movilizaciones multitudinarias, aportan elementos frescos a las explicaciones que nos hacen falta.

Perspectiva Sur