POR NUESTROS DERECHOS VII.-

El pueblo de Quilmes con derecho a voz y voto ha elegido a sus representantes (ediles) a quienes confía de manera primordial la defensa de sus intereses, con desempeños activos y eficientes, siendo acreedor por ello a estar informado de las actividades que desarrollan y especialmente de los asuntos de particular relevancia. Sin embargo, con motivo de la importancia que reviste la cantidad de edificios torre que van surgiendo a nuestro alrededor, no conocemos donde han tenido o tienen origen los mismos que se multiplican constantemente sin planificación coherente. No existe ninguna comunicación a la población sobre las obras de este tipo cuando se presentan en etapa de proyecto ni sabemos sobre que bases se otorga autorización pero sí, todos conocemos, que por sus características especiales y su avance representan perjuicios de toda índole.
Las autoridades no se hacen acertado eco de nuestras serias inquietudes y reclamos periodísticos, radiales y por volantes entregados en domicilio, que no son caprichosos ni tendenciosos sino justos, razonables y respetables.
Llegó el momento de requerir de aquellos que nos representan que se hagan cargo y rindan cuentas de los riesgos que desencadena la construcción indiscriminada de torres.
Queremos creer que no están dando la espalda ni haciendo oídos sordos a los que fuimos sus electores, que a su vez somos sus vecinos, correligionarios, amigos o familiares, ante la defectuosa consideración de este problema.
Queremos saber quienes apoyaron o incentivaron la proliferación de estas torres y quienes pusieron reparos o no compartieron su ejecución.
Es una manera de conocer quienes son verdaderamente nuestros representantes.
Queremos saber quienes estuvieron llevando la voz del vecindario en el tratamiento y discusión del tema.
Queremos conocer si alguno de los intervinientes en la deliberaciones es propietario y habitante desde hace 40, 50, 60, 70 o más años de una casa a la que estén cercando con paredones de 15, 20, 25 o más metros de altura para que digan lo que han hecho o lo que sienten cuando siendo hoy adultos están forzados a tomar decisiones indeseables e imprevistas a favor de su salud y bienestar ante el desarraigo que les imponen capitalistas foráneos y/o comerciantes inescrupulosos, conquistadores de apoyo.
Queremos conocer si el Municipio posee registros de donde provienen los habitantes de las torres, para establecer cuantos son de lugares ajenos a Quilmes y a todo lo nuestro y que vienen a contribuir a una superpoblación que aumenta la desproporción con la cantidad y calidad de los servicios de toda índole, con que se cuenta.
Más aún, queremos conocer si el Municipio registra de donde provienen los capitales y/o firmas encargadas de solventar estas grandes inversiones y que no son locales ya que sabemos de casos que llegan después de agotar las posibilidades en otros lugares para construir o están limitados para hacerlo; y de otros que incursionan en lo que consideran terreno propicio y libre de controles como está ocurriendo en Quilmes.
Somos conscientes de lo que decimos y estamos por el buen camino, el único que nos salvará de hipotecar nuestras raíces y también nuestro futuro.
Existe en nuestras vidas solamente un acontecimiento al que no podemos encontrarle solución ni revertirlo y no es el que nos ocupa.
La oportunidad es muchas veces mejor aliada que la fuerza y muchas veces se adelanta a la razón.
Se está ocasionando un perjuicio evidente que exige ya poner límites. El tema ha sido objeto de tratamiento sin agotarse los pro y las contras; debemos de pensar que se ha procedido con ligereza en el tortuoso camino de una solución que no llega y desde ya no aceptamos que la autoridad supere al razonamiento.
Quien con su propia creencia comparta lo expuesto está también dispuesto a exigir por la salud y por la vida que merecemos.
No perdamos tiempo, la oportunidad para nosotros es hoy, debemos sumar voces, sumar voluntades, sumar acción, sumar presencia y todo debe surgir organizadamente de las reuniones habituales que realizamos, donde el sentimiento y la decisión firme van de la mano de nuestra Agrupación Quilmes Unido, manos siempre listas para batir al compás de nuestra lema: Por nuestros derechos, ¡basta de torres en nuestra ciudad!